Nut

jueves, 13 de enero de 2011


El Dios Anubis

Es el encargado de conducir a los muertos a su nuevo destino en el más allá.
Anubis era venerado por los que esperaban ser juzgados en el momento de la muerte.
Anubis considerado el inventor de embalsamamiento, proceso con el cual se evitaba la descomposición del cuerpo y así se estaba seguro de que una vez juzgado el cuerpo el espíritu volvería al cuerpo.

Anubis es representado con cabeza de perro-lobo o de chacal.
El color de este Dios és el negro. En Egipto el negro no es símbolo de duelo si no de renacimiento.
Acompaña al muerto hasta el juicio de Osiris y guia el alma en su recorrido post-mortem.
Anubis y el alma del difunto se encaminan a los confines del mundo , hacia una de las cuatro montañas que sostienen el cielo. Se embarcan en una nave llamaba "Jeper" e inician el descenso por la galería de la noche, donde corre el rio del infierno. La serpiente Apofis, pretende ser un obstáculo en el camino para la embarcación y los monstruos que poblaban las orillas se arrojaban sobre los viajeros serpientes, babuinos, reptiles...Anubis protegía al difunto aterrorizado.
Para salir de este reino aterrador había que abrir siete puertas, cada una custodiada por una divinidad.
Anubis ayudaba al difunto a encontrar las palabras mágicas para abrir esas puertas: " Abrid la puerta, sed mis guardas" el difunto gritaba para poder atravesar las puertas.
Siempre acompañado por Anubis, después de pasar la última puerta, llegaba a la gigantesca sala de justicia de Osiris.
El difunto agotado, sostenido por Anubis, debia subir la pirámide escalonada que conducía hasta el trono de Osiris con la balanza, instrumento de su juicio.
Allí se lo jugaría todo...ni Anubis podría salvarlo.

El alma se encuentra sola frente a sus jueces, Osiris, Maat (diosa de la verdad y la justicia) y Tot (Dios de la sabiduría y la escritura), que anotará el resultado del juicio. Los pilares de la bondad que aprecian los dioses, del juicio, siguen siendo todavía hoy los pilares de la ética universal, rico en bellos ideales y no pesado en faltas.
Cuarenta y dos asesores escucharán la confesión del muerto. Colocarán su corazón en uno de los platillos de la balanza, en equilibrio con Maat, al otro lado de la balanza.. Si lo que confesó es verdad, el corazón, que nunca miente, conservará su equilibrio, si el peso de los pecados es mayor, se hará más pesado y se inclinará la balanza en su contra. Será entonces presa de la "devoradora" el león con cabeza de cocodrilo y parte trasera de hipopótamo.
Si por el contrario, se le consideraba justo de voz, se le abrirán las puertas de la eternidad.
Ahí terminaba la misión de Anubis. volvería a las puertas donde ya lo estaba esperando otros muertos.

viernes, 18 de junio de 2010

Mi pasión por Egipto


El antiguo Egipto levanta pasiones y atrae a muchos seguidores desde hace mucho tiempo.
Mi pasión por la cultura del Antiguo Egipto, comenzó hace muchos años, posiblemente tenía menos de 10 y de eso hace ya unos cuantos... Pero el tema que me ocupa hoy es otro.

Recuerdo haber visto la película de la momia, pero aquella que era en blanco y negro, para mi la auténtica, la de Boris Karloff. Quedé fascinada pensando en la maldición del faraón, en que las momias pudieran salir de sus tumbas y cobrar su venganza contra todo aquel que perturbara su sueño eterno.

Los antiguos Egipcios se esmeraban mucho para que sus difuntos pudieran pasar a la "otra vida" preparados con joyas, amuletos, comida e incluso muebles para que un día pudiera llegar algún ladrón de tumbas con sed de tesoros y arruinara todo eso.
Nunca se pudo comprobar la inscripción que dijeron haber encontrado en la puerta de la tumba de Tuthankamon: "La muerte vendrá con alas ligeras sobre el que se atreva a violar esta tumba". al parecer resultó falsa.

Pero lo que si es cierto es que una seria de muertes y acontecimientos extraños acompañaron al posterior descubrimiento de la tumba de Tuthankamon.

En abril de 1923 Lord Carnavon, el hombre que financió las excavaciones de la tumba, fallecía, la causa, la picadura de un insecto. En el momento en el que falleció, la ciudad de Egipto se vio sumida en la oscuridad, un apagón generalizado lo dejó todo a oscuras.
Se sucedieron otras muertes que directa o indirectamente tenían algo que ver con la tumba de Tutankhamon.
Primero y como por contagio, murió el perro de Lord Carnavon, el cual se encontraba en Londres, después otro animal: un canario que Carter tenía y según cuentan fue devorado por una cobra, el animal que representa la protección del faraón.
El hemanastro del duque y la enfermera que le atendió en su postración también fallecieron.
Un viejo amigo de Carnavon, un magnate del ferrocarril, George Jay Gould, visitó Egipto cuando supo de su desaparición. Tras recorrer la tumba de Tutankhamon en compañia de Howard Carter, sufrió un fuerte acceso de fiebre y murió en pocas horas.
El radiólogo responsable de realizar dichas pruebas a la momia, falleció en plena realización de su trabajo.
Más adelante moría Arthur Mace, por un agotamiento repentino, sin causa aparente, que le hizo perder el conocimiento y ya no volvió a recuperarlo, era el encargado de la conservación de los objetos frágiles del hallazgo.
También murieron el secretario de Howard Cárter y el egiptólogo francés George Benedite, este último a causa de una congestión pulmonar.

Mito o realidad lo único real es que finalmente entre 23 y 27 personas, animales aparte, perdieron la vida.

Se dieron varias explicaciones a la maldición, algunos atribuían las muertes a un poderoso veneno con el que quizás impregnaban los objetos.

También se habló de un hongo, Aspergillus niger, que al entrar en contacto con el aire se activó y resultó letal.

Solo Howard Carter, el auténtico protagonista del descubrimiento, quedaría a salvo de la maldición.
Carter murió por causas naturales, 17 años después del descubrimiento, tras invertir unos 10 años en extraer todos y cada uno de los objetos para su conservación y estudio.

A día de hoy aun hay quien se pregunta que pasó realmente, yo creo en el mito, pero la autentica causa de las muertes es muy probable que fuese por el hongo.

martes, 8 de junio de 2010

Momificación


Los antiguos Egipcios, creían en la supervivencia después de la muerte y es por lo que practicaban la momificación.
La muerte era un paso hacia otra vida, no era la desaparición.
Embalsamaban los cuerpos , los momificaban y los abastecían de tal manera que al pasar al más allá no les faltara de nada, comida, joyas, muebles, amuletos...
Prueba de ello es la magnifica colección de objetos que encontraron en la tumba de Tuthankamon.

La primera fase era la evisceración:
Lo primero que realizaban era el drenaje encefálico. Con un gancho extraían el cerebro a través de las fosas nasales, si quedaba algún resto lo eliminaban con disolvente.
Acto seguido, evisceraban el abdomen, con una larga incisión a lo largo del costado se retiraba con las manos y se depositaba en los vasos canopes, que después se colocaban en la tumba con la momia.
Concluida la evisceración se limpiaba el abdomen con vino de palma y sustancias aromáticas, se rellenaba el cuerpo con lino impregnado de resina, natrón, cebollas secas y serrín, se añadian plantas aromáticas para auyentar a los insectos.

La siguiente fase era la desecación del cuerpo, en particular la piel y los músculos. Sumergían el cuerpo en un baño de natrón el cual absorbía lentamente la humedad del cuerpo, este baño debía de durar 70 días, que es el tiempo que tarda una constelación en volver a aparecer tras su desaparición en el horizonte, esto constituye un símbolo del renacimiento tras la muerte.

La tercera fase, se aplicaba un ungüento compuestyo de aceite de enebro, cera de abeja, especias y un poco de leche o vino, para suavizar ligeramente los tejidos.
Ya solo quedaba envolverlos con las vendas.
Comenzando por los dedos de las manos y los pies, se proseguía con el cuerpo y se finalizaba con la cabeza. El tejido empleado para envolver el cuerpo estaba empapado con gomas y resinas para facilitar su adherencia. Si el cuerpo que estaban preparando pertenecía a alguien adinerado, utilizaban tela fina de lino. Mientras vendaban el cuerpo colocaban amuletos en lugares que ellos consideraban estratégicos, aquellos que se creían podrían estar más expuestos a posibles ataques de malos espíritus deseosos de adueñarse del cuerpo. Los colocaban en las órbitas de los ojos, o en la incisión abdominal.
Por último la ceremonia de la "abertura de la boca", para que proporcionara el aliento vital y la energía necesaria para presentarse ante los que pronunciarian el juicio sobre su corazón, Osiris, Anubis, Thot, y Maat.
Una condición indispensable para la segunda vida era la bondad.
Una excelente momificación no garantizaba la vida en el más allá.

domingo, 6 de junio de 2010

CITAS


-¡Agarra tu cabeza, recoge tus huesos, reúne tus costillas, limpia de tierra tu carne!
El guardian de la puerta viene a por ti, te toma de la mano, te lleva hacia el cielo-
( Texto de una pirámide del Imperio Antiguo)




-Los agujeros no están para que miremos hacia adentro, sino para que el faraón mire hacia afuera, quizás hacia las estrellas del norte llamadas Imperecederas por que nunca se ocultaban.-
(Jean- Philippe Lauer, Egiptólogo.
)



viernes, 4 de junio de 2010

Amuletos







Alguno de los amuletos que utilizaban los antiguos Egipcios


ESCARABAJO ALADO


Se solían colocar sobre el pecho de las momias en el lugar del corazón, ya que creían que era una fuente de energía. Para consagrar el amuleto hay que invocar el nombre del Dios Thot.


OJO DE HORUS

O también llamado Oudjat. Protege contra todas las influencias negativas. Aporta seguridad, fuerza y salud. Era colocado entre las vendas de las momias.


ANJK

O Llave de la Vida. Protege y da seguridad a quien lo lleva.

SHEN

U órbita del disco solar. Hace inmortal a quien lo leva. Simboliza la vida eterna.



SHED, DJED


Este amuleto asegura a su poseedor, longevidad, protección y estabilidad.
Por analogía con la espina dorsal de Osiris, refuerza la columna vertebral.
Simboliza el árbol en que Isis escondió el cuerpo de su esposo, para protegerlo de los celos de Seth. Las 4 barras horizontales representan los cuatro puntos cardinales




SHABTI

Son figuritas pequeñas que se solían colocar en las tumbas, llevan inscripciones del Libro de los Muertos.






TIT


O Nudo de Isis. Simbolo de la Diosa Isis, que representa un nudo de cinturón de color rojo, contrapartida femenina del pilar Dyed.
Amuleto que protege las momias.






BEHEDETY

Forma de Horus, Sol provisto de dos Ureos que simbolizan el dominio del astro sobre el conjunto del mundo.
Su efigie protectora presidía los lugares de paso, como las puertas, pero también ciertas escenas rituales.



GATO

Protector del Hogar. Como símbolo de la eficacia y la feminidad del ama de casa, aparece representado el las paredes de las capillas funerarias, bajo el asiento de la difunta.







Vasos Canopos

Estos cuatro vasos, con cabeza de hombre, de cinéfalo, de halcón y de chacal. Contenían las vísceras del difunto, que se confiaban a las cuatro entidades protectoras que representaban estos vasos.




jueves, 3 de junio de 2010


Los antiguos, pintaban en la tapa interior de los sarcófagos su imagen con la cual velaba por el difunto y recomponía su universo.
Nut, hija de Shu (Dios del aire) y Tefnut (Diosa del agua), era esposa de Gueb (Dios que representa la tierra = Egipto), con el que tuvo cuatro hijos: Osiris (Rey de los Infiernos), Isis (Diosa de la fecundidad), Set(Dios del Desierto) y Neftis(Protectora de los sarcófagos y los Vasos Canopos). Ra, junto a la Diosa del Cielo, Geb y sus cuatro hijos formaban la Eneada de la Heliópolis, que es una agrupación de los Teólogos, con un propósito clasificatorio.
A la Diosa Nut, se la representaba a menudo desde un sicomoro, ofreciendo el agua de la vida y los beneficios de la tierra cultivada desde el mas allá.
Posee un Templo de Culto en la Heliópolis
Los techos de la tumbas Ramesidas del Valle de los Reyes, están decorados con representaciones del Cielo.
Se evoca a este con dos representaciones de la Diosa Nut, de espaldas, cuyo cuerpo arqueado sobre la Geb recorren los seres celestes.

Por la noche el vientre de Nut esta tachonado de estrellas, pero también de representaciones de los planetas y de los Decanos, que eran los meses del calendario Egipcio, que se dividía en tres décadas, cada una de ellas comenzaba el día que aparecía en el cielo una estrella determinada que estuviese en conjunción con el sol durante sesenta días. Entre los Decanos mas importantes figuraban Sirio (Sotis), cuyo orto helíaco señalaba el principio del año solar, y Orión, cuya aparición simbolizaba la vuelta a la vida de Osiris.
Durante el día doce discos solares señalan las horas diurnas.


Nut, en la tumba de Tutmosis III, en el valle de los Reyes.